viernes, 27 de julio de 2018

15.


Han pasado 4 meses y 8 días que no he vuelto a escribir.
Ahora es verano.
Hace calor, los días son más largos, la ropa es muy cómoda y la fruta está riquísima.
Se supone, que el verano está para disfrutar, viajar, salir y no entrar. Conocer gente nueva, reencontrarte con aquella que ya conoces. No parar y ser más feliz que el resto del año.
Pero la verdad es que para mí, el verano, es todo lo contrario.
Tengo más tiempo libre con lo que mi cabeza no para quieta. Pienso demasiado las cosas que hago, que no hago y que hice en su momento.
Siento la imperiosa necesidad de cambiar, irme lejos y vivir ese verano que tanto sueño.
Algún día pasará.
Quizás cuando sea capaz de alejarme de mi compañera, mi gemela.
La ansiedad.